Literatura y memoria visual: Cruces estético-performativos entre las narrativas de la memoria y el Estallido Social de octubre 2019
El llamado Estallido Social, ocurrido entre octubre y diciembre de 2019 en Chile, puso de manifiesto la importancia de las contranarrativas urbanas que operan en contextos de lucha social y protesta (Márquez y Rozas, 2019). Entendidas como tales los rayados, pancartas y performance artísticas, las contranarrativas suponen una resignificación del espacio urbano, entendiendo a la ciudad en su calidad de discurso (Rama, 1998), que plantea una imagen homogénea de identidad a partir del monumento (Harvey, 1990). La discusión con dicho discurso evidencia una relación estético-performativa con las narrativas literarias de la memoria que se gestan desde los 90, donde la articulación de contraespacios (Locane, 2013) conlleva, también, un acto de resignificación del espacio. De este modo, el presente estudio supone una comparación entre el archivo visual del Estallido Social y los cruces estéticos que tiene con la literatura de la memoria. A partir de la lectura y análisis de autores como Bisama (Taxidermia, 2014), Celedón (La Filial, 2012), Sutherland (Papelucho gay en dictadura, 2019) y Fernández (Fuenzalida, 2012; Chilean Electric, 2015), vemos que las marcas de la ruina, la fotografía y la performance vienen a tensionar los signos hegemónicos establecidos en el diseño urbano, poniendo sobre la palestra el problema de la memoria y la identidad de quienes experimentan la ciudad.