El proceso de transformación de los roles de género ha tenido diversos puntos de quiebre a lo largo de historia, sobre todo a partir de la intensa discusión sobre los derechos del individuo que desató la Ilustración y, luego con mayor fuerza, la revolución francesa. La reivindicación de los derechos de las mujeres, imaginar y movilizarse en contra de la condición femenina de subordinación en la sociedad, fue cobrando forma con mayor fuerza desde que Olympe de Gouges y Mary Wollstonecraft tomaron la pluma.