A partir de la figura del kaiju, nos acercamos a una amplia galería de criaturas cinematográficas que amenazan a la humanidad y su entorno, por su carácter destructor y la manera en que se originan. Dos muestras de ello son Godzilla, la primera película del género dirigida por Ishirō Honda en los años cincuenta, y Godzilla vs. Hedorah, filme que décadas después muestra cómo este tipo de cine, sin alejarse de la preocupación por los temores nucleares y contaminantes en la sociedad japonesa, podía ser un colorido espectáculo de entretenimiento familiar.