La Isla de Esculturas fue concebida como una construcción cultural de la naturaleza y revertida a paisaje estético, teniendo en cuenta la singularidad etnográfica, histórica y antropológica del lugar donde se enclava: la Xunqueira del Lérez de Pontevedra. Constituye igualmente un homenaje al granito, material identitario de la escultura de todas las épocas y una referencia de la cultura y el arte que sus autores entroncan con la conciencia mítica y el simbolismo del The Waste Land (La tierra baldía) de T. S. Eliot. Como La tierra baldía, que reunifica pasado y presente, entre metáforas y símbolos, los escultores que intervienen en el espacio contorneado por el río Lérez acogen, en un todo, una pluralidad de alusiones culturales, lenguajes y conceptos, referencias clásicas y experiencias más contemporáneas. Fueron invitados a intervenir doce artistas: Giovanni Anselmo, Fernando Casás, José Pedro Croft, Dan Graham, Ian Hamilton Finlay, Jenny Holzer, Francisco Leiro, Richard Long, Robert Morris, Anne & Patrick Poirier, Ulrich Rückriem y Enrique Velasco.