El nuevo contexto educativo, plantea a la innovación como una necesidad apremiante, para poder replantear los modelos educativos tradicionales, y con ello cubrir las nuevas demandas de la sociedad. Sin embargo, innovar implica la creación y difusión de productos, procesos y métodos, en donde el capital humano es su esencia (OECD, 2010). Exige la consideración de la dimensión personal de quienes intervienen en ella. Por tanto, la innovación y el liderazgo son dos aspectos medulares en la sociedad del Siglo XXI, ya que son la llave del éxito de las organizaciones en el futuro (EOI, 2010). La parte más importante del éxito de las innovaciones depende de la realización acertada de los cambios culturales e institucionales, mismos que se llevan a cabo por el líder, quien funge como el gestor del cambio.
El liderazgo escolar es una prioridad en la política educativa mundial, porque son los líderes escolares quienes deben dominar las nuevas formas de pedagogía y mejorar la práctica de los docentes a su cargo. Por esto, es necesario conocer si el estilo del liderazgo se vincula con la aceptación de una innovación educativa, ya que son los docentes quienes deben practicarla. Aquí el papel del directivo es fundamental para fomentar en su contexto escolar esta actitud de aceptación al cambio. Con base en esta premisa, se desarrolló una investigación con un grupo de Directores participantes del programa LISTO en México, quienes se capacitan por medio de la metodología blended learning; en la que se analizó mediante el Modelamiento de Ecuaciones Estructurales, en qué medida se relaciona el Liderazgo Transformacional con el grado de aceptación del Aprendizaje Combinado, además de identificar cuál de los factores que integran este estilo de liderazgo es el mejor predictor de esta aceptación.