La realización de tareas diarias, como caminar, subir escaleras o levantar objetos, requiere fuerza y potencia muscular. Las reducciones asociadas a la edad en la fuerza y la potencia pueden afectar la capacidad del adulto mayor para llevar a cabo este tipo de actividades. Objetivo: El propósito de este estudio fue examinar los efectos de dos tipos de entrenamiento en fuerza (PEF) de 16 semanas, uno realizado a alta velocidad (GAV), versus uno a baja velocidad (GBV), sobre, la fuerza y potencia máxima muscular, en un grupo de adultas mayores. Metodología: 86 mujeres con edades entre 60-81 años participaron de forma voluntaria en el estudio y fueron asignadas de forma aleatoria al GAV (Tres series a una velocidad de 0.60m/s, con pérdidas máxima del 10% de velocidad) o al GBV. (Tres series de 10 repeticiones al 70% de 1RM) Los grupos realizaron tres entrenamientos semanales. Antes y después del PE se evaluó: la fuerza máxima (1RM), la potencia pico (Pp) y la velocidad media propulsiva (VMP), en extensión en piernas y de brazos, la fuerza prensil, la velocidad de la marcha (VM), y la fuerza resistencia y agilidad (batería senior fitness test). Resultados: después del periodo de entrenamiento se observaron mejoras significativas (p <0.05) en todas las pruebas en los dos grupos. Sin embargo, los resultados obtenidos por el GAV fueron significativamente (p<0.05) superiores a los del GBV, en las pruebas de capacidad funcional, VM, VMP y Pp. En las pruebas de fuerza máxima y fuerza prensil las diferencias no fueron significativas. Conclusión: El entrenamiento en fuerza realizado a altas velocidades parece tener un mejor efecto en el fuerza resistencia y agilidad y en la potencia muscular, que el entrenamiento de fuerza realizado a baja velocidad.Abstract. Performing daily tasks, such as walking, climbing stairs or lifting objects, requires strength and muscular power. Age-related reductions in strength and potency may affect the ability of the elderly to carry out these types of activities. Objective: the purpose of this study was to examine the effects of a sixteen-week strength training program (PE) performed at high speed (GAV) versus a traditionally executed program (GBV), on functional performance, maximum strength, and muscle power in a group of elderly women. Methodology: 86 women aged between 60-81 years old participated voluntarily in the study and were assigned randomly to the GAV (three series at 0.60m/s speed, with maximum losses of 10% speed) or to the GBV (three series with three sets at 70% of 1RM). Both groups performed three weekly training sessions. The maximum strength of upper and lower limbs (1RM), prehensile strength, walking speed, maximum power, mean propulsive velocity (MPV), and functional performance (senior fitness test) were evaluated before and after the PE. Results: significant improvements were observed (p<0.05) in all the tests in the two groups after the twelve weeks of training. However, the results of GAV were significantly (p <0.05) higher than those of GBV regarding agility and dynamic equilibrium, stationary walking, sitting and standing, walking speed over 4 and 6 meters/hour, MPV, and peak power. The differences were not significant in the tests of maximum strength and prehensile force. Conclusion: Strength training performed at high speed seems to have a better effect on functional performance and muscle power than strength training performed at low speed.
Effects of High-Speed Versus Traditional Resistance Training in Older Adults
